Friso de las Panateneas
Friso de las Panateneas, Fidias, s. V
a.C., estilo griego clásico, en el Partenón, en La Acrópolis de Atenas.
Rodeaba la parte exterior de la cella del Partenón. Provisto
de numerosos accesorios de metal, perdidos en la actualidad, estaba policromado
para definir algunos objetos no esculpidos. Los bloques de mármol estaban
ligeramente inclinados hacia alante para conseguir así que les llegara la luz
de abajo y que el espectador pudiera observarlo mejor.
Representa una procesión que se origina con una cabalgata
encabezada por carros. En los flancos norte y sur se inicia el cortejo a pie
con los ancianos portadores de ramas, músicos, portadores de hidrias,
conductores de ganado y animales próximamente sacrificados.
Las dos alas del desfile desembocan en el lado oriental, en
la fachada del tempo. En las esquinas,
aparecen doncellas atenienses vestidas con túnicas (técnica de los paños
mojados, típica de Fidias) y los héroes de las diez tribus de Atenas. Todos
participarán de la ofrenda del peplo ante la cella de Atenea.
Las principales divinidades olímpicas contemplan
relajadamente la escena, destacan: Poseidón, Apolo y Artemisa, conersando entre
ellos durante la celebración. Los dioses están realizados en una escala
superior que el resto del friso mediante representarlos sedentes.
El Partenón
Partenón,
autores: Ictinos y Calícrates. S. V a.C., en la Acrópolis de Atenas. Estilo
griego clásico. En mármol y madera.
Nos encontramos ante una
obra religiosa de primer orden, se trata del templo principal de la ciudad de Atenas,
que debía de alojar la estatua de la diosa Atena Parthenos, diosa protectora de
la ciudad. Este templo fue construido siguiendo las características del
Orden Dórico. Aunque en la actualidad resalta el color blanco de su mármol, originalmente
estaba policromado con fuertes colores que resaltaban sus elementos
arquitectónicos.
Es un templo octástilo,
con ocho columnas en sus lados más cortos y 17 en sus lados más largos. Las
columnas recorren sus cuatro lados, se trata por lo tanto de un templo
períptero, y seis columnas preceden a la pronaos. De la pronaos accedemos a la cella
que se encontraba dividida en tres naves con columnas superpuestas para ganar
la altura necesaria para alojar la estatua de 12 metos de la diosa. En su paste
posterior, incomunicada con el resto, se encuentra otra cámara que recibe el
nombre de Opistodomos que habría de servir para alojar el tesoro de la diosa.
Este templo es un buen
ejemplo de las proporciones armónicas que debía de perseguir el templo griego.
Así cabe destacar no sólo las proporciones de sus elementos sino las
correcciones ópticas que realizaron los arquitectos para lograr esa visión
perfecta del conjunto (desigual distancia de los intercolumnios, abombamiento del
estilobato y del entablamento para evitar la sensación de hundimiento en el
centro, ligera inclinación de los fustes, etc...).
El Partenón fue famoso
en la antigüedad no sólo por sus esbeltas proporciones sino también por su
decoración escultórica, hoy día repartida fundamentalmente entre el museo del Louvre
y el Británico.
Erecteion
Autor: Mnesicles,
estilo griego clásico s. V a.C., en mármol. Último edificio construido en la
Acrópolis de Atenas.
Templo complejo y original
que debía levantarse en un recinto donde se realizaban cultos antiguos y se
conservaban los dones milagrosos que habían hecho los dioses Poseidón y Atenea
en su disputa por el dominio de Atenas. En él también se rendía culto a los
legendarios reyes Erecteo y a Cécrope. Por lo tanto la función de este edifico
era religiosa.
El Erecteion está considerado
uno de los templos de planta más compleja y refinadas de la arquitectura
religiosa griega. La necesidad de adaptarse a un terreno irregular en altura y
de respetar el olivo y la fuente sagrada obligó al arquitecto a apartarse de
las plantas tradicionales. En realidad son dos templos unidos. Por un lado
estaría el templo dedicado a Atenea, orientado al este, que presenta un pórtico
hexástilo de esbeltas columnas de orden jónico Desde dicho pórtico se accede a
una única cella rectangular donde se rendía culto a una estatua que
representaba a Atenea realizada en madera. Este primer templo no se comunica
con el segundo, que se sitúa a su espalda y cuyo acceso, por el lado norte se
hace a través de un pórtico tetrástilo, también de orden jónico. Una vez
atravesado el pórtico se accede a una cella dedicada a Poseidón que comunica,
en ángulo recto con una cella doble dedicada a Erecteo y Cécrope. Además desde
el pórtico se accedía al recinto, situado en el lado oeste del templo, donde se
encontraba el olivo sagrado y la fuente natural, recordatorios de la disputa de
los dioses por Atenas. Desde la pronaos también se accedía a la famosa tribuna
de las Cariátides, situado en el lado sur, que se caracterizaba por sus
esculturas femeninas que hacían la función de columnas.
El edifico está rodeado por
un entablamento que consta de arquitrabe formado por tres franjas superpuestas,
friso, con un relieve continuo y cornisa similar a la dórica. Tenía frontón y
cubierta a dos aguas.. Destaca la evolución del estilo jónico visible en la
esbeltez de las columnas y el refinamiento de la decoración escultórica.
El resultado final se
caracteriza por una serie de soluciones parcialmente brillantes dentro de un
conjunto que, sin embargo, es incoherente.
Discóbolo
Autor: Mirón, s. V
a.C, estilo griego clásico, copia en mármol de original en bronce.
Escultura en bulto
redondo que representa a un atleta en el momento de lanzar eldisco. El momento
de haber elegido este momento y no el de reposo (característico de los kuroi de época arcaica, muestra la nueva
etapa que denominamos clásica donde se investiga el movimiento y la captación
de un momento fugaz. Ello hace que aparezca el atleta inclinado hacia delante,
levantado al máximo el brazo derecho, con el que sostiene el disco que va a
lanzar mientras deja caer el peso en la pierna derecha, retrasando la
izquierda. Ello genera una composición en zig-zag que se genera en la pierna
derecha, en la que apoya el peso del cuerpo, hasta la rodilla, de ahí seguía
otra línea a la cadera, de la cadera parte otra a la cabeza y de la cabeza
termina en el extremo del brazo derecho. Por otro lado, el escultor muestra un
mayor naturalismo a la hora de la representación de la anatomía, en la
representación de los músculos en tensión del cuerpo del atleta.
La
Obra ya adquirió fama en la antigüedad, como lo demuestra las diferentes copias
realizadas en talleres en torno al siglo I a.C. que nos han llegado y es un
claro ejemplo de la evolución de la escultura griega. Así frente al hieratismo
y las formas planas de la escultura de época arcaica, ésta obra muestra ya un
conocimiento de la anatomía por parte del escultor que se refleja en los
músculos en tensión del atleta captado en el instante previo al lanzamiento del
disco. Sin embargo, esta obra del escultor Mirón, quien trabajo en torno a
mediados del siglo V a.C. aún muestra ciertos rasgos de arcaicismo como el
hecho de ser una obra de marcada frontalidad, el poco desarrollo escultórico
del pelo de la cabeza, pegado al cráneo, así como la falta de expresividad del
rostro, en clara contradicción con la tensión del resto del cuerpo en un
momento de máximo esfuerzo.
Doríforo
Autor: Policleto,
siglo V a.C., estilo griego clásico, copia en mármol de original en bronce.
Escultura
de bulto redondo que presenta a un hombre joven desnudo en actitud de avanzar
con el brazo izquierdo flexionado pues portaba una lanza que se ha perdido.
Respecto al tema hay diversas interpretaciones pues se puede considerar que
representa a un atleta o bien, de carácter mitológico o heroico al representar
a Aquiles. Lo cierto, es que el tema tan sólo supone la excusa para que el
escultor plasmara de manera plástica el ideal de belleza masculino que expuso
en su obra “Canon”.
Esta Obra supone la
encarnación más pura del prototipo del cuerpo viril perfecto, de elegancia
austera, sin formas hercúleas ni amaneramientos. Aporta una interesante
solución para las figuras de pie en reposo: el contrapposto, una pierna soporta
el peso del cuerpo y la otra apenas toca el suelo con la punta del pie, la
tensión que genera se compensa con ligeras inclinaciones en la pelvis y en los
hombros. El contraste por un lado del torso contraído y por el otro del
extendido da al cuerpo un aspecto de dinámico equilibrio muy diferente a la
simetría estática de los kuroi.
El Doríforo aún mantiene
algún resabio de arcaísmo: está tallado con rudeza, los pectorales son planos y
las líneas de la cintura y de la cadera están muy marcadas. Se representa en
actitud de avanzar. Es una acción con mucha menos fuerza que la del Discóbolo
de Mirón, pero el torso responde plenamente a ella.
Por otro lado, la
inclinación hacia la derecha de la cabeza del Doríforo supone la ruptura del
punto de vista único que tenían las esculturas arcaicas.
Aunque no se ha llegado a
ninguna conclusión sobre las proporciones del canon, parece ser que la cabeza
es la séptima parte del cuerpo; el rostro está dividido en tres partes iguales:
la frente, la nariz y la distancia de ésta al mentón y el arco torácico y el
pliegue de la ingle son arcos de un mismo círculo; entre otras muchas medidas y
proporciones. Para Policleto la belleza se traduce en belleza y proporción.
Hermes de Olimpia
Hermes
con el niño Dioniso, de Praxíteles, s. IV a.C., griego clásico, en mármol.
Única original de Praxíteles.
Obra exenta que en realidad se trata de un grupo escultórico de tema
mitológico al estar compuesta de dos esculturas. Por un lado Hermes, un joven
desnudo de cuerpo esbelto que sostiene con el brazo derecho al niño, Dioniso,
también desnudo apoyado sobre un tronco cubierto prácticamente en su totalidad
por una tela.
Hermes, por mandato de Zeus, conduce al pequeño dios Dionisos a la mansión
de las ninfas para su crianza. Durante el camino el dios ha hecho un alto para
descansar y parece ofrecerle algo al niño dios, probablemente un racimo de uvas.
El dios Hermes aparece como un joven desnudo, algo característico de la
escultura clásica griega, y en contrapposto, pero, como consecuencia de la
tensión ejercida por la pierna derecha y la elevación del brazo del mismo lado,
la cadera se arquea de manera exagerada creando un perfil en "S" conocido
como curva praxiteliana. Por otro lado, el modelado del cuerpo es muy suave,
sin destacar los músculos que parecen tan sólo insinuarse bajo la piel. Este
modelado suave hace que la luz resbale de la misma manera pasando de una forma
gradual de las zonas más iluminadas a las zonas en sombra en un efecto conocido
como esfumato, también propio de este escultor. Este efecto lumínico crea en el
rostro un expresión de ensoñación melancólica inconfundible en la obra de Praxíteles.
Por el contrario el tratamiento del cabello adquiere mayor volumen con el uso
del trépano. Igualmente, la tela que cae del tronco que sirve de base al niño,
crea abundantes pliegues verticales, curvos y oblicuos con efectos de
claroscuro que contrasta que el suave tratamiento de la luz del cuerpo así como
una textura más áspera en oposición al tratamiento más blando de la anatomía.
En esta obra, la única
original a de Praxíteles, podemos ver los cambios significativos que se
produjeron en la escultura del siglo IV con respecto a la del siglo V a.C. Así
frente a la visión que ofrecía Fidias de los dioses olímpicos como dioses
todopoderosos e inaccesibles, como Zeus o Atenea, ahora se opta por representar
dioses más jóvenes como Hermes, Apolo o Afrodita, en actitudes cotidianas, a
veces intrascendentes, que muestran un cambio en la percepción de la divinidad
por parte del mundo griego. Los dioses empiezan a mostrar sentimientos como el
afecto, visibles aquí en la comunicación visual y gestual establecida entre
Hermes y el niño, captados en un momento, el del descanso, intrascendente
cuando no anecdótico marcado por el interés que la uva, fruto del vino,
despierta en el dios.
Todos estos contenidos han sido extraidos de los apuntes de historia del arte de Javier Talavera y la página de Docencia Virtual del IES Infante Don Juan Manuel.
Respecto a las Imágenes: Son todas del buscador de Google.
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